"Un adulto que revisa Y restaura su relación con su niño o niña interior no se vuelve más infantil, sino más completo. Adquieren la libertad de poder acceder a la energía y a las riquezas que les eran propias en su infancia. Se trata de poder volver a beber de este manantial de inspiración que es la niñez, en lo que tiene de espontaneidad, despreocupación, contacto genuino, creatividad, capacidad de asombro y otras riquezas. Es regar con júbilo las tierras secas y solitarias del adulto, a menudo mal heridas de resignación y desconfianza, con las aguas vivas y claras de la infancia, ricas en fe e intuición". Alain Vigneau En CLOWN Y GESTALT vemos cómo siendo bien pequeños/as hemos sobrevivido creando una manera de sentir, de hacer y de pensar: hemos creado un personaje. Y a medida que hemos ido creciendo, en un proceso de identificación, nos hemos creído que este personaje “soy yo”, limitando nuestra libertad, nuestras potencialidades creativas y creadoras, dejando fuera un ...
Psicóloga (Col. Nº G - 4629)- Psicoterapeuta Humanista