Si uno renuncia a sí mismo, esta renunciando al Amor. Si el amor sólo fuera sentimiento y emoción pura, quedaríamos inevitablemente a la merced de sus altibajos y fluctuaciones. Sin embargo, los consultorios psicológicos están repletos de mujeres y hombres valientes que rebaten la idea de que el amor es incontrolable y totalmente irracional. El amor completo, el que incluye pasión (eros), amistad (philia) y ternura (ágape), no llega de improviso como un demonio o un ángel que se apodera de nosotros, también existe la voluntad de amar o de no amar. Y estos tres amores es necesario integrarlos internamente… es necesaria la Unión. Y esta unión no sucede sin nuestro consentimiento y dedicación. Nuestra cultura ha hecho una apología del amor incondicional: “Hagas lo que hagas te amaré igual” y esto da pie a una gran confusión. Amarte no significa estar a tu lado de cualquier manera y a cualquier precio. Si el amor lo justificara todo estaría por encima de l...
Psicóloga (Col. Nº G - 4629)- Psicoterapeuta Humanista